Él es un habitual de los escenarios vascos, no hace demasiados meses pasó con la obra “En construcción” y después formó parte del “Julio Cesar” de Mario Gas, ahora Tristán Ulloa se ha subido a las tablas del Teatro Arriaga para hacernos pensar con el montaje “El Invernadero”, pero para Tristán venir a Bilbao es dar vida a personajes, encontrarse con amigos y echar de menos a otros como al desparecido Alex Angulo.

B.- ¿Qué tiene de especial “El Invernadero” para que haya gustado tanto?

T.- La obra se desarrolla en una especie de balneario donde ingresan los supuestos disidentes, gente incómoda para el sistema que son sometidos a tratamientos de shock para convertirlos en seres dóciles y apacibles, un balneario regentado por personal supuestamente cualificado pero en realidad muy corrupto, vamos que cualquier parecido con la realidad no es pura coincidencia.

B.- ¿Crees que si el poder de ahora pudiera hacer lo mismo lo haría?

T.- De eso precisamente habla el autor de la obra Pinter, por cierto un texto escrito en 1958, trató de reflejar una realidad que cuando estrenó la obra en los 90 seguía vigente y cuando la hemos estrenado nosotros este año sigue vigente, con lo cual parece que existe la constante de que unos pocos quieren someter al resto.

B.- Por lo menos es una obra que nos va a hacer reflexionar…

T.- Sí, y sobre todo es una obra con mucho humor, es una obra peculiar porque se sale de la obra habitual de Pinter, tiene mucho que ver con el género sarcástico pero gracias a la forma que le ha dado Mario Gas se trata de un montaje de enredos y de entradas y de salidas… pero claro, tiene un contenido crítico muy fuerte.

B.- ¿En alguna ocasión has tenido problemas por decir lo que piensas?

T.- A mi pesar alguna vez he dicho cosas que me han pasado factura (entre risas), sobre todo en los últimos tiempos decir lo que piensas en realidad, aunque sea de forma solapada, a algunos nos está pasando factura… el que pone el acento o la lupa en algo o denuncia algo al final lo paga de alguna manera, bien en la sociedad o en el propio mundo de mi profesión.

B.- ¿Si miramos a nuestro país dónde deberíamos poner el acento?

T.- Deberíamos denunciar lo pornográfico que está siendo todo, en cómo la clase política se gira hacia los ciudadanos cuando hay elecciones a la vista, parece que durante cuatro años ser elegido es un cheque en blanco y tener una mayoría absoluta ha quedado claro que es peligroso… creo que estoy diciendo algo obvio.

B.- ¿Confías en los nuevos partidos?

T.- … (después de una larga pausa) no me decanto por ninguno de ellos, yo siempre he sido votante de Equo desde que nació en partido. En estos partidos nuevos no hay ideas nuevas pero sí hay ganas de romper un estatus quo y eso está bien… pero lo que no me genera ninguna duda es que nos dejemos meter miedo por el resto de partidos, y que no debemos creer el mensaje de que cualquier cambio es siempre a peor, eso lo debe de decidir la gente… la táctica de meter miedo me parece de un mal competidor.

B.- Volviendo a tu profesión… sigues subiéndote a los escenario pero sin perder tu faceta como director…

T.- Retomaremos la gira en enero con la obra “Adentro”, de la compañía Adentro Teatro, con parada en Madrid y mientras nos dejen o podamos (entre risas) subsistir, lo haremos aunque cada vez es más complicado.

B.- ¿Qué es para un actor en realidad el éxito, llenar patios de butacas, no parar de trabajar, las alfombras rojas y los flashes?

T.- El éxito en este oficio pocas veces tiene que ver con lo económico, que llenes un patio de butacas o tengas éxito no significa que eso te vaya a retribuir económicamente, una obra de éxito no tiene por qué llenarte los bolsillos, hay mucho que pagar por medio y puede que incluso acabes pinchando. La única forma de recuperar el dinero es haciendo giras y llegando a ciudades como Bilbao.

B.- ¿Hacía mucho que no venías por Bilbao?

T.- En junio estuve con la obra “En Construcción” en la sala BBK, y un año antes estuve en el Arriaga con Julio Cesar. Me encanta Bilbao, la última vez que vine estuve viendo a Ramón Barea en Pabellón 6, tengo muy buenos amigos y tenía a otro queridísimo amigo como Alex Angulo. Sigo teniendo muchos amigos en todo Euskadi.

B.- ¿Qué haces para estar tan en forma y tan guapo?

T.- (entre carcajadas). He estado a punto de poner el altavoz del móvil cuando me has dicho esto… mucho deporte no hago, salgo a correr cuando se alinean los astros, intento hacer un mínimo de ejercicio pero muy poco, lo que intento es cuidar la dieta.

B.- ¿Crees que eres guapo, resultón o gracioso?

T.- Hostia… yo no me considero gracioso en todo caso resultón.

B.- ¿Y cómo resultas en el cara a cara en la barra de un bar?

T.- Intento ser una persona bastante normal y corriente, a veces la gente se sorprende por encontrarse con alguien que tiene una conversación normal y que no pretende dar otra impresión, la vida que llevo es bastante normal, familia, mi hijo, le llevo al cole todos los días, hago la compra, cojo el metro, no entiendo la vida de otra manera. Puedo estar un día en la alfombra roja de San Sebastián y otro poniendo copas detrás de una barra.

B.- ¿Sigues teniendo éxito con el sexo opuesto o con el mismo sexo?

T.- Depende de los días, lo que intento es tener éxito conmigo que ya es bastante, hay que intentar gustarse aunque a veces somos demasiado críticos con nosotros mismos pero hay que ser un poco exigente sobre todo cuando te dedicas a esto, no es cuestión de que alguien diga mira que buen actor pero qué barriga tiene…

B.- ¿Tus proyectos de futuro?

T.- Acabo de rodar una película en París con Julie Depardie, seguir con esta gira y con la de “Adentro” y en breve rodar con Julio Medem.