“La pecera es un 4×7 (4 pasos de ancho por 7 pasos de largo) y simboliza el espacio que necesito para estar encerrada y poder volar. Un lugar limitado en el tiempo y expuesto al mundo para que fluyan mis pensamientos, mis deseos, mis anhelos; un trampolín acristalado que llega desde mi pasado para unificar en este momento de mi vida proyectos aparcados y nuevas ideas. Creo en lo posible por muy imposible que parezca. “One week, one million” es una plataforma para recuperar la ilusión por los sueños. El contenido será un recorrido por todo lo televisible, teniendo como esencia el humor y de combustible la improvisación”.

Fotografías: Lucho Rengifo

Nos sumergimos con Nenita Danger en su particular pecera, una performance que, bajo el nombre de ‘one week, one million’, arrancará el 31 de diciembre. Durante siete días y siete noches, Nenita acampará en el renovado espacio ‘All’ de la calle San Francisco, como pistoletazo de salida de su nueva programación. “La idea surge por un proyecto que tenía yo hace tiempo de encerrarme en un contenedor para hacer una rave con un DJ, yo como gogo y un único invitado”. Tal y como nos cuenta Nenita, se trata de la unión de muchas ideas que desde hace tiempo rondaban por su cabeza. El resultado no es otro que una semana encerrada en un espacio acristalado, a pie de calle, y retrasmitido vía streaming.

Como si de un Gran Hermano se tratara, Kepa (que así se llama el artista) será Nenita Danger durante siete días y siete noches consecutivas. “La gente me pregunta si estoy preparado para ser Nenita tanto tiempo seguido, a lo que yo les respondo que llevo 15 años preparándome para esto siendo Nenita, no metido en el papel, sino convertido en Nenita”.

Con esta iniciativa, Kepa rescata muchos proyectos, “en su día se me ocurrió pedir dinero para comprarme un piso en Madrid, hacer bombones con el nombre de Nenita… y en este formato he visto que tienen cabida todo ese abanico de ilusiones, pensamientos y proyectos que te gustaría hacer pero que por una cosa o por otra los dejas en stand by”.

Pero el proyecto no queda ahí y su intención es mucho más ambiciosa. Como su propio nombre indica (‘one week, one million’) esta performance tiene una cara B: Nenita pretende conseguir, en esa semana, no sólo un millón de seguidores, sino también un millón de euros. “El tema del millón de euros no surgió desde el comienzo. El reto que me propuse en un principio era conseguir un millón de visitas a esta performance” Un reto difícil, pero no imposible, que a Nenita le sirve para enviar un mensaje: “recuperar la ilusión por los sueños”.

Nenita nos cuenta cómo hace tiempo, un día de fiesta, pasó un cochazo por delante: “voy a pedir dinero para un ferrari, bueno no, mejor para una casa en Madrid que es lo que necesito”; una idea que dejó aparcada pero que retoma ahora. “Lo que quiero en este momento es ser millonaria para quitarme el crédito de la cervecera, comprarme un piso y con lo que me sobre vivir tranquila, que es lo que necesito para levantarme de la cama, actuar y liberarme de todo lo que me ata y evita que exista como chica pensante”. Y para conseguir esto, Nenita sólo precisa de una simple donación de un euro de las personas que disfruten de su performance. “Hombre, la gente es libre de no dar nada o de dar más de un euro, cada uno como vea. Incluso se acepta a un millonario súper majo que quiera darme él solo el millón”.

De todas maneras, éste no es el leitmotiv de la performance, ya que lo fundamental es “ofrecer espectáculo desde el humor, y mi único objetivo no es conseguir ese millón de visitas o de euros; esto es un reto más que se incluye dentro de esta performance en la que voy a estar trabajando con toda la ilusión del mundo”.

Tal y como nos adelanta Nenita, se va a tratar de un ‘street reality’, retransmitido vía streaming que va a contar con una programación como si de un canal de televisión se tratara. “La gente podrá verme durmiendo, comiendo… y aunque habrá espacios para la improvisación, también contamos con secciones definidas”. Esa semana, aparcaremos la televisión convencional para conectar con Nenita, que nos brinda en bandeja una oferta de lo más variada: podremos disfrutar de entrevistas “tengo ya varias entrevistas concertadas, como la de Jose, cocinero de Zubi Buru que nos hablará también de la protectora de animales ‘Ayra’ la cual gestiona, La Prohibida o la Terremoto de Alcorcón, con la que estamos en negociaciones”; un programa de cocina a las mañanas, “ya tengo algunos cocineros confirmados, como Álvaro Garrido, cocinero del restaurante Mina y estrella Michelín”, e incluso una sección de gimnasia matutina “para no entumecerme en la pecera”. También contaremos con espacios de varietés, un programa musical, “vamos a representar la vida hipotética de Nenita”… Además, habrá un espacio en el que la gente podrá hacerle preguntas a la artista. “Queremos que haya comunicación bilateral”. Toda una experiencia multisensorial, que también va a contar con la colaboración de un perfumista para elaborar dos fragancias del evento.

Y es que la cosa no queda ahí. Además de todo esto, Nenita también va a crear un crowdfunding (financiación en masa) para llevar una obra de arte a la luna con el dinero obtenido. “Se están colocando sondas, satélites para investigación… pero a nadie se le ha ocurrido que si realmente hay otra vida en el universo y alguien de otro planeta va a la luna, en vez de ver un cacharro que pueda parecer una radio vieja pueda ver una estatua o un monumento”.

En la redacción de BLUE ya hemos apuntado en rojo en el calendario el 31 de diciembre, y no sólo porque venga la familia de Cuenca a cenar a casa, sino porque ese día comienza esta aventura que hará que estas Navidades sean un poco diferentes. “Daré mis propias campanadas, y al ser una noche tan especial, voy a hacer una ruta por diferentes locales de Bilbao y zonas de fiesta, haciendo entrevistas y retrasnsmitiéndolo en directo vía streaming, todo ello en una furgoneta acondicionada”.

Así que ya sabéis, todos a colaborar con Nenita porque “si al cuarto día he conseguido medio millón de visitas, alargo una semana más mi estancia”. Además ésta será la primera de, esperemos, muchas peceras que recorrerán el mundo con Nenita en su interior. “En las siguientes el dinero recaudado lo destinaré íntegramente a causas solidarias”.