El Vaticano se retracta de las declaraciones del papa sobre el matrimonio igualitario
Según un documento que la Secretaría de Estado vaticana ha mandado a los nuncios (embajadores) en todos los países, que han enviado a su vez a los obispos, se afirma que las declaraciones de Francisco estaban descontextualizadas y que no cambian la doctrina de la Iglesia.
En un momento de la película documental del director de origen ruso Evgeny Afineevsky, Francisco aseguraba que los homosexuales:
“son hijos de Dios, tienen el derecho a una familia. No se puede echar de la familia a nadie ni hacerle la vida imposible por esto. Lo que debemos crear es una ley sobre las uniones civiles. De este modo los homosexuales tendrían una cobertura legal. Yo me esforcé en ello”
Rápidamente estas palabras generaron una tormenta mediática en Roma y en todo el mundo, al ser la primera vez que Francisco hablaba de manera tan contundente a favor de las uniones civiles entre personas del mismo sexo. Pero ahora la Secretaría de Estado explica a sus representantes en el mundo, que las frases fueron parte de “dos respuestas distintas editadas y publicadas como si fuera una sola respuesta”, es decir, manipuladas por el director Afineevsky al cortar las preguntas y el contexto.
La versión que ofrece el Vaticano a los nuncios ante la “confusión” es que el director tergiversó sus respuestas privándolas de contexto:
“El Santo Padre había hecho en primer lugar una referencia pastoral sobre la necesidad de que un hijo o una hija de orientación homosexual nunca sea discriminado dentro de la familia. Las palabras se refieren a ellos: los homosexuales tienen derecho a permanecer en la familia; son hijos de Dios, tienen derecho a una familia. No se puede echar a nadie de la familia y hacerle la vida imposible por eso”.
Sobre las uniones civiles homosexuales, la Secretaría de Estado explica que el Papa respondía a una pregunta sobre su posición cuando era arzobispo de Buenos Aires. El Vaticano mantiene que el Papa especificó, antes de abogar por una ley de convivencia civil, que “es una incongruencia hablar del matrimonio homosexual”.