La mayoría de las personas piensan que cuando tienen una aventura están poniendo en peligro su relación, pensamiento alimentado sobre todo por la educación que hemos tenido. En los últimos años el matrimonio ha sufrido cambios hace unas décadas inpensables. Hoy se desposan parejas del mismo sexo, hay divorcios, matrimonios sin hijos, e incluso la gente puede casarse tarde o nunca hacerlo, sin que nadie se queje por ello. Pero la infidelidad sigue siendo una zona prohibida y la sociedad la seguimos castigando.

Según algunos sexólogos las personas que caen en la infidelidad no lo hacen porque estén insatisfechas con su pareja sino por recapturar esa sensación de estar vivos con otra persona, muchas veces sin llegar a existir el sexo. Asimismo, el amor y el deseo no son lo mismo y no siempre van sincronizados, y algunos estudios afirman que el cerebro tiene circuitos diferentes para el amor profundo, el amor romántico y la pasión por lo cual es perfectamente posible querer a alguien y desear a otro, e incluso querer a dos personas al tiempo.

Las mujeres y los hombres buscamos autoestima, nuevas vivencias y autorrealizarnos para alcanzar la felicidad y mantener viva la llama de su relación. En este sentido, en una encuesta realizada a 10.000 personas, 8 de cada 10 mujeres, y más del 70% de los hombres encuestados afirmaron haber tenido una aventura. El sector masculino aseguró buscar más para satisfacer sus fantasías y deseos sexuales (incluso heterosexuales con personas del mismo sexo), mientras que las mujeres buscaban cercanía y calidez en sus encuentros.

los expertos comparten que la fidelidad de por vida con una sola pareja es casi inexistente en estos días. Las relaciones, tal y como las conocemos, están evolucionando, y las parejas se atreven a probar conceptos alternativos para mejorar y mantener sus relaciones sentimentales en el tiempo.

Uno de los datos más llamativos es que el 24% asegura que en realidad es infiel porque quiere mantener a su familia unida. Muchas personas engañan para permanecer en su matrimonio, de hecho, algunos dicen que lo hacen porque quieren mantener unida a su familia, encontrando una pareja externa en lugar de romper su matrimonio al divorciarse o separarse.

Casi dos tercios de las mujeres dicen que les gusta tener una aventura porque se sienten deseadas. Además, más de la mitad dice que las hizo sentir más vivas y el 39% dijo que recuperó su confianza en sí misma. Los hombres no son tan diferentes. Casi la mitad dijo que se sentía deseado, algo menos de la mitad que se sentía más vivo y la mayoría que con la infidelidad se habían cumplido sus necesidades sexuales.

El 58% de los aventureros entrevistados afirmó conocer a sus amantes a través de Internet. 2 de cada 10 aseguraron haber tenido algún encuentro con un compañero de trabajo. Por otro lado, los clubs nocturnos también son puntos de referencia en donde poder establecer nuevas relaciones, así como los círculos de amistades.