Bizkaia by… La Reno
Es uno de los artistas ’pata negra’ con más tablas que ha parido Bizkaia y la bruja particular de BLUE. La entrevista con Rafa, ‘La Reno’, la hacemos entre ensayo y ensayo, pocas horas antes de su bolo en los carnavales de Sestao. La diva, que desde hace dos años nos ilumina con el Horóscopo BLUE, nos lleva a la costa, concretamente a Plentzia, localidad costera que puso patas-arriba durante sus primeras 35 primaveras. Un enclave incomparable, de la mano de un artista incombustible. ¡Disfruten del tour!
Por circunstancias de la vida, actualmente ‘La Reno’ reside en Derio, pero no se resiste a viajar, una vez por semana, a su amada Plentzia. El olor del salitre le obsesiona, le sana y le purifica. “Me encanta ir en coche y, según voy llegando a Plentzia, bajar la ventilla y disfrutar del olor a salitre. Mínimo una vez por semana tengo que ir allí a respirarlo”.
Es ‘plenciano’ de nacimiento y allí las ha liado petardas. “Lo reconozco, he sido muy famoso, siempre he destacado”. Damos fe. El pueblo entero se enroló en el Grand Prix de Ramón García (sí, el concurso de las vaquillas) y repitió en TVE en el ultrapopular ‘¡Qué apostamos!’ por culpa de un artista en ciernes que se encargó de todo. “Incluso monté dos autobuses para llevar público al programa”.
Impulsó el que hoy en día es el mejor concurso de playbacks de todo Bizkaia y ha batido el récord de certámenes organizados en su pueblo natal. “Plentzia es un pueblo pequeño, con un casco antiguo precioso, muy tranquilo, y con un paseo que pocos tienen. Lo tiene todo”, defiende.
Allí aprendió a nadar, “en la ría”, y tuvo una infancia “preciosa”, con episodios de “robo de maíz” por los campos incluidos. También practicó pesca de angulas junto a su aitite. Recuerdos siempre ligados al mar.
Vale, nos ha convencido. Queremos pasar un domingo de marzo en el pueblo natal de ‘La Reno’. ¿Qué nos propone que hagamos? “Pues hay que pasear por el Casco Antiguo, que está entero reformado, y ver el frontón. Es alucinante. Además, el centro de Plentzia es el astillero, y las fiestas de San Antolín son buenísimas” ¿Pero se liga?, le preguntamos. “Sí, pero catarros nada más”, contesta.
Para el pintxo-pote, La Reno elige el Uriola, un conocido local hostelero entre el Astillero y el puente. “Es perfecto para un café relajado, es un sitio de toda la vida”. Para comer, no duda en escoger el Batela. “Comida de caserío, hecha fenomenal por Edurne. Además, para los aficionados al rugby, emiten los partidos en pantalla gigante”.
No todo es mover el papo en Plentzia. Nuestra artista de cabecera pasea por la playa cuando busca paz y relax… “Me encanta ir al pico donde empieza la playa, al rompeolas. Si estoy deprimido, voy allí, cierro los ojos y respiro”.
A la playa de Plentzia, eso sí, le pone los cuernos con su vecina de enfrente. “Es que soy nudista, y justo delante tengo la playa de Barrika… pero desde allí veo el arenal tan bonito que tenemos en Plentzia, eh!”, argumenta.
La Reno quiere más. No contenta con el paseo que nos ha regalado por Plentzia, nos propone trasladarnos a San Juan de Gaztelugatxe, “a poder ser un día gris, un día de lluvia”, o al Bosque de Oma.
Pero si le preguntamos por su rincón favorito, lo tiene claro. “El Castillo de Butrón es lo más bonito que tenemos. Un castillo del siglo XIX que está perfecto para los años que tiene. Allí respiras aire, respiras fresco, limpio… Me impresiona mucho ese castillo… incluso montaría un puticlub ahí dentro”, nos propone. Logramos convencerle de que no es una buena idea, pero se queja de que el castillo en cuestión no está muy potenciado.
Y ya que ha sacado el tema del sexo y la noche, le pedimos, para finalizar, que nos cuente cuál es su recorrido en una noche de gamberreo por Bilbao… “Pues salgo poco, pero La Reno sí suele ir al Badulake y al Mykonos, un bar de ambiente de toda la vida. Eso sí, para empezar la noche voy al Nervión, un bar con solera, de cuando empezábamos. Allí fueron mis primeros morreos…”